Poemas:
Primado Negativo 
"Desearte es ver todos los
árboles y el cielo, el agua y el
aire en ti.
Mi vida se ha hecho simple,
clara, ardiente, limpia."
César Moro

¿Qué recito, si no puedo
recitar tu cuerpo,
sereno
como un loto de oro
flotando en el Ganges sagrado?

Era tu vientre un bosque de bambú
atravesado por susurros.
Y soñé que Sarasvati, diosa de la música,
había ocultado en él su veena
para huir del silencio del cosmos;
y por eso resonaba
cuando mi amor lo buscaba
como resuenan los ragas
de todas las noches:
en un temblor de pieles en éxtasis,
tan dulces en su fervor
como las guirnaldas que adornaban los cabellos
de todas las apsaras
soñadas en las historias
de caligrafía sánscrita.

Y, como ya no puedo
cantar tu cuerpo, voy
delirando metáforas, para decir,
«te adoro»,
cuando tan fácil es lanzar un grito
de un amante perdido,
capaz de tocar todo el aire sin melodía
dormido en los banianos de una tarde,
ya sin dioses.



Regresión a vidas pasadas
“He aquí mi oficio
pero cuánto me ha costado
he convertido en agua
mi paciencia
en pan
mi soledad”

Jorge Eduardo Eielson

Nada me haría falta
para abrazar la dicha eterna,
aquel don de los dioses
cuando héroes y mortales se entrelazan;
tan poco, ante los tesoros
conquistados en campañas gloriosas.

Riquezas intangibles,
visiones en las alturas,
místicas a veces,
agónicas otras,
abrazando con fervor
la gloria inmortal de Alejandro.

Ideas y mitos:
¡tantos sistemas pugnan en mi mente
por ocupar el trono
del palacio que noche a noche erijo,
con la mente en la estrategia y símbolo
y la mano en pergaminos
que guardan saberes,
ordenados en rollos y tablillas,
en biblioteca y memoria!

¡Oh palacio consagrado al Vacío!
Partenón de palabras y ritmos,
pura geometría
de nociones que se hacen muro
y perduran en el vértigo.

Paisajes y cuentos:
tantos mundos conquistados,
ciudades amuralladas,
geografías mágicas...
ristras de voces atadas,
cosechas de colores almacenadas;
praderas, montes, arboledas
donde triunfa la vida
y el moho se vuelve sanador del aire.

En soledad,
recorro una ronda infinita
en primavera, tras las batallas,
el cosmos de jardines de Babilonia.

Cincuenta campañas gloriosas
de templos, palacios, ciudades,
callejones perfumados con ecos
de sátiros y princesas,
nieves perpetuas, mares,
soledad de desiertos y selvas,
y en lo alto del palacio, sólo ruinas,
esa flor, luz añil,
entre piedras sagradas,
nacida de semillas tras semillas
que sembró una tarde la doncella,
con mirada real, de Agamenón.

¡Oh campos de pilares muertos,
tesoros de Micenas,
frente a tumbas profanadas por la historia!

Poco me haría falta;
esa riqueza
y junto a mí,
mujer y musa,
maestra en la verdad de la belleza oblicua,
su temblor, su sonrisa.



La historia oculta
“Hoy me siento mejor.
Nuevamente mi cuerpo
se traga tu recuerdo sin morirse,
como si devorase su propio corazón”

Juan Gonzalo Rose

En el umbral del sueño,
la luna derrama su encanto,
rozando el vestido de la noche
con gracia gentil.
Desde las montañas del sur,
las estrellas descienden
por los pliegues profundos
de los barrancos,
donde la primavera enloquecida
enciende secretamente
los destellos brillantes de las flores salvajes.

La noche se despliega, negro y dorado,
en la bahía azul de los susurros,
donde nadan peces invisibles.

Aquí estoy,
luna,
como en tiempos pasados, simulando
esa amistad que arrastra las almas al éxtasis,
pensando en los poetas, tus compañeros,
hablándote como ellos lo hicieron,
solo,
mientras el mundo gira y murmura.

Melancólico
sin estar triste, con la luz del día
brillando a mis espaldas.
Ella,
sentada en el trono de mi conciencia,
mientras desenredo, en mis versos,
mi feroz pasión por la verdad,
que me lleva a imaginar otras vidas,
sin haber resuelto aún la mía.
Sobre el autor:
Yohei Moriya Miyakawa: poeta y abogado peruano-japonés por la Universidad Nacional de Trujillo, con maestría en derecho por la Universidad Clemson. Se desempeñó como docente de gestiones judiciales en la Universidad Austral (Argentina) y argumentación jurídica en la Universidad San Francisco (Quito). Además, es director de la Fundación Biblioteca Virtual El Último Bastión y Fundador de la Cátedra Internacional Antonio Cillóniz De la Guerra.

Tiene publicados tres poemarios y ha escrito trece prólogos para poetas de Nicaragua, El Salvador, Ecuador, Argentina, España y Perú. Obtuvo la mención honrosa en el evento internacional “Nuestro Ilustre Personaje Carlos Augusto Salaverry”, organizado por la Municipalidad de Sullana y UGEL Sullana. Sus poemas han sido traducidos al italiano, francés, inglés y japonés. También es miembro del Movimiento Cultural Internacional Ergo.
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